Grandes Espacios es una revista especializada en actividades que se practican en la naturaleza, especialmente el excursionismo y el montañismo de baja dificultad. Fiel a su consigna de que un paisaje sólo se reconoce caminando, mes a mes Grandes Espacios descubre un nuevo territorio ofreciendo toda la información necesaria para que el lector lo descubra a fondo y sin prisas.
Grandes Espacios
Otoño en el Valle del Jerte PALETA DE COLORES • Desde hace casi veinte años, la comarca del Jerte da la bienvenida al otoño con la Otoñada, un programa de actividades culturales, festivas, deportivas y gastronómicas que se extiende desde finales de octubre hasta mediados de diciembre y que da la oportunidad de disfrutar a conciencia de una estación que viste de mil colores el Valle del Gozo. Como dicen en el valle: “Si te gusta el otoño... amarás el Valle del Jerte”.
UN VALLE, CUATRO ESTACIONES
Excursiones doradas
TODO EL JERTE en una APP
Esencia Vasca • El sendero de gran recorrido GR 38 Ruta del Vino y el Pescado atraviesa Euskadi de sur a norte desde los viñedos de Rioja Alavesa hasta los puertos pesqueros de Bermeo, Lekeito y Ondarroa. Su nombre, de resonancias gastronómicas, da algunas pistas de sus cimientos históricos pero no del inconmensurable patrimonio natural y cultural que jalonan sus 170 kilómetros.
GR Etapa 38 a etapa
GR 38 Variantes
El Camino del Cid Para bicis gravel • El Camino del Cid, el itinerario turístico y cultural más completo y extenso de nuestro país, acaba de estrenar una ruta para bicis gravel que alterna la versión BTT con la ruta cicloturista por carretera. El resultado son 1500 kilómetros de amable pedalear por algunos de los territorios menos conocidos de nuestro país siguiendo las huellas de un personaje legendario.
RUTAS DE OTOÑO EN MADRID Y ALREDEDORES • El otoño no es especialmente generoso con el centro peninsular, en general, y con la Comunidad de Madrid en particular. Los lugares donde la estación se manifiesta con fuerza y con suficiente extensión para que puedan ser objeto de deseo de los excursionistas no forman legión, pero si uno no está obsesionado con los grandes hayedos del Pirineo o de los bosques del Cantábrico, encontrará que hay suficientes rincones en la comunidad y en las provincias limítrofes para gozar de muchos días de caminatas doradas, y con el plus de que a veces estos lugares son auténticos “exotismos” y con muchas sorpresas, y no solo arbóreas. Las propuestas que proponemos en esta revista son una pequeña muestra de ello.
ROBLEDAL DE HORCAJUELOS • Las crónicas y los nombres de algunos pueblos y lugares acreditan que las montañas que rodean el valle de Lozoya estuvieron en otro tiempo cubiertas de robles. La tala para obtener leña y espacios para pasto primero, y el crecimiento de los pueblos después, fue reduciendo la extensión de los bosques de melojos hasta quedar muy mermados. Más tarde, la repoblación a base de pinos dejó poco aire para que los robles retoñaran. Quedan, no obstante, importantes manchas en las que se esconden árboles centenarios, como es el caso que aquí traemos.
SENDA BOTÁNICA DE CANENCIA • En la vertiente norte del puerto de Canencia, en el recóndito valle que recorre el arroyo Sestil, sobrevive una de las joyas naturales más curiosas y bellas de la Comunidad de Madrid. Es un bosque de abedules, pequeño pero de una importancia sobresaliente, ya que este árbol, de aspecto frágil, tronco plateado y hojas que en otoño son intensamente amarillas, vive en latitudes más septentrionales. Aunque los abedules son la estrella del bosque, en el entorno aparecen otras especies que convierten a este rincón en un santuario vegetal. Una sencilla senda facilita –y regula– la exploración de este milagro guadarrameño.
NATURALEZA EN...